¿Qué quiero decir con esto?... pues se me ha ocurrido hablarles de la cocina y sus sentidos, pero es un tema tan amplio que no conviene dispararlo de un solo tirón, así que para hacerlo más ameno dedicare un post a cada sentido y este no será más que una breve introducción. Al final cuando termine hablar de todos los sentidos los ire enlazando en este mismo post, asi tendrán su rapido acceso, (cada sentido les ira apareciendo en rosa).
El cuerpo humano necesita el equilibrio de todas estas cosas en cada comida. A la hora de apreciar un cuadro, una escultura, película, una obra musical, la emoción que pueda producirse se percibe a través de los sentidos. En el caso de la cocina sucede exactamente lo mismo; son los sentidos son los que permiten que nuestro cerebro reciba esta sensación. A continuación le explicare brevemente qué papel juega cada sentido en la percepción de las sensaciones culinarias.
Vista: Presentación de los platos, formas, colores, identificación del producto.
Olfato: Olor de los alimentos y condimentos, estado de los alimentos, preparación de los jugos gástricos que posibilitan la digestión.
Tacto: Este se refiere a las texturas y temperaturas básicamente.
Oído: Aunque a muchos les sorprenda o no se lo hayan planteado, el sonido de ciertas texturas en la boca, por ejemplo el de los crujientes.
Gusto: Percepción de gustos primarios. Sabor de los alimentos, su intensidad y sobre toda la apreciación de la armonía y equilibrio de ellos.
El hilo conductor que une todo esto es la memoria, que es la que gestiona la biblioteca de sensaciones en nuestro cerebro, me explico si han visto la película de Ratatuille recordaran cuando el critico de restaurantes prueba en el restaurante la ratatuille, y sus recuerdos viajan en el tiempo y recuerda la ratatuille que preparaba su abuela, o madre no recuerdo bien, y esto hace que de su memoria resurjan agradables sensaciones que ya se habían experimentado anteriormente y todo esto gracias a los sentidos.
Una curiosidad de cocina muy útil, con sentimiento y emoción. ¡Me encanta desde el principio al final!
Un saludiño y hasta la vuelta.